Contacto Agro-Industrial El mercado de aceites vegetales

El mercado de aceites vegetales


Argentina es el cuarto productor mundial de aceite de girasol y de soja. Del total producido en el país, se exportó el 68% del aceite de soja y el 50% del aceite de girasol, en promedio en las últimas diez campañas. Además, Argentina se posiciona como el primer exportador mundial de aceite de soja.

 En el plano internacional, el precio del aceite de soja continúa su tendencia bajista, en donde la política que implementaría la administración de Donald Trump en materia energética, podría ser un factor determinante, principalmente la disminución de inventivos a la producción de biocombustibles. Mientras que, la guerra Rusia -Ucrania genera incertidumbre en el mercado del aceite de girasol, la cual se refleja en las subas que ha experimentado el precio de dicho aceite en los últimos meses.

 

Cosecha de maíz en General Fotheringham - 29/06/2023 - Fuente: colaboradora DIA

El mercado mundial de los aceites vegetales

Los aceites vegetales constituyen un componente importante en la dieta humana y, en los últimos años, también ha tomado relevancia en la creación de combustibles sostenibles. Por lo que, el consumo de aceites refinados ha tenido un considerable aumento, generando precios más elevados y, por ende, mejoras en los márgenes económicos. Así, teniendo en cuenta los datos del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), para la campaña 2024/25 proyectaría un récord en la producción y consumo mundial de los aceites vegetales, ubicándose en 227 y 224 millones de toneladas respectivamente. El aceite de palma es el más producido a nivel mundial, representando el 35% del total. En segundo lugar, se posiciona el aceite de soja con el 29% y en tercer lugar la colza con el 15%. El resto de los aceites tienen una participación menor al 10%, como el girasol (9%), almendra de palma (4%), maní (3%), semilla de algodón y coco (2% respectivamente) y finalmente el aceite de oliva (1%). En cuanto al volumen comercializado a nivel mundial también se ubica en primer lugar el aceite de palma con el 56% del total, seguido por el de soja (14%), girasol (14%), colza (9%), almendra de palma (%), coco y oliva (1%).

En la tabla N°1 se presenta la hoja de balance mundial de los aceites vegetales para la campaña 2024/25 proveniente de las estimaciones del USDA. En la misma se observa que el aceite de palma, además de ser el más producido a nivel mundial, también es el más exportado y consumido internamente. Mientras que, en el otro extremo se encontraría el aceite de oliva con la menor producción y consumo a nivel global, sin embargo, para esta campaña se observaría un incremento del 26% en la producción, lo cual reflejaría una recuperación en comparación a las dos campañas previas, en las cuales las condiciones climáticas adversas en la zona del Mar Mediterráneo afectaron al desarrollo del cultivo.

Respecto a los principales productores de aceites del mundo, observando la tabla N°2, Indonesia es el mayor productor de aceite de Palma, China el de soja, la Unión Europea el de colza y Rusia el de girasol.  Argentina ingresa al podio de los primeros cinco en solo dos tipos de aceites, en el de soja y de girasol, ocupando el cuarto puesto en ambos casos.

Sin embargo, en cuanto a los principales exportadores de los aceites vegetales Argentina ocupa el primer puesto en la exportación de aceite de soja con el 46% de la participación total.

Por el lado de los precios, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (más conocida como FAO por sus siglas en inglés) publica mensualmente el índice de precio de los aceites vegetales, que consiste en relevar la variación mensual del precio promedio internacional de diez diferentes aceites comerciados en el exterior.

Para el mes de octubre se posicionó en un promedio de 153 puntos, un 7% por encima del índice de septiembre y el valor más alto de los últimos dos años. El organismo plantea que desde mayo del corriente año que se observa una tendencia creciente en los valores dado los aumentos en el precio que vienen experimentando estos aceites. En particular, el de palma que creció por quinto mes consecutivo debido a una menor estimación de producción para la presente campaña, lo mismo ocurre en el caso del precio de aceite de girasol y colza que experimentan incrementos en sus precios debido a una oferta más ajustada. En el caso del precio del aceite de soja, al igual que los anteriores, presenta un aumento a causa de una demanda creciente ante la falta de disponibilidad de aceites alternativos.

Mercado internacional de los biocombustibles

El futuro del mercado de los biocombustibles se encuentra transitando un periodo de incertidumbre. En Estados Unidos, donde la producción de los mismos venía creciendo a ritmo exponencial, tras el triunfo de Donald Trump en la presidencia, podría cambiar su rumbo. Luego de nominar como titular de la Agencia Ambiental de la Nación (EPA por sus siglas en inglés) al ex diputado de Nueva York, Lee Zeldin, los precios de los futuros de aceite de soja del CME Group (“Chicago”) registraron fuertes bajas, arrastrando al resto de los productos del complejo oleaginoso, debido a que la agenda del nuevo presidente consideraría que los biocombustibles no son un factor estratégico de desarrollo para el país.

Para contrarrestar este fundamento bajista y, siguiendo con la agenda del nuevo presidente, es muy probable que se puedan presentar factores alcistas para el aceite de soja en el mercado interno estadounidense, el cual, tiene como contrapartida una relación inversa con el valor de la harina de soja. Esto se debe a que, siguiendo la agenda del nuevo presidente, es muy probable que se aplique aranceles al UCO (Aceite de cocina usado) proveniente de China, a la colza proveniente de Canadá, el cual podría ser reemplazado por una mayor demanda del aceite de soja para la elaboración de biodiesel, generando una presión alcista en su cotización. En tanto que, hay incertidumbre con respecto a que decisión se tomará sobre el sebo bovino proveniente desde Argentina.

En cuanto al petróleo, principal insumo competidor de los aceites para la producción de combustibles, la Agencia de Energía Internacional (IEA) ha proyectado una desaceleración en el crecimiento de la demanda mundial, que se explica principalmente por el débil consumo de China. Mientras que, la oferta seria abundante, que presionaría los precios a la baja, poniendo en desventaja a los biocombustibles, volviéndolos relativamente más caros.

Teniendo en cuenta otra potencia de los biocombustibles, como lo es Brasil, se encuentra estableciendo las bases para posicionarse como líder hacia una movilidad sostenible, elevando los cortes de los biocombustibles a través de programas innovadores, con un enfoque en la descarbonización y el desarrollo sostenible.

Precios FOB en Argentina

Con respecto a los FOB oficiales que publica la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación (SAGyP), se puede observar que el comportamiento de los precios de los aceites más comercializados en el país sigue una tendencia similar. Analizando los últimos cinco años puede apreciarse que, el valor del aceite de girasol generalmente se ubica por encima del aceite de soja, en lo que va noviembre en promedio se ubicaron en USD 1.157 y USD 1.119 por tonelada respectivamente. El mayor precio del aceite de girasol radica en el recrudecimiento del conflicto entre Rusia y Ucrania. Por otro lado, los futuros del complejo sojero dependen de las decisiones de la nueva administración de Trump tal como se mencionó previamente.

Importancia en el agregado de valor

La producción de aceites vegetales implica la incorporación de valor agregado a través de la industrialización de los granos oleaginosos. A través de la transformación de la materia prima se permite alcanzar distintas ventajas como la diferenciación de los productos, mejorando su valor de venta y, en consecuencia, los ingresos de los productores y el acceso a nuevos mercados.

Actualmente en Argentina se industrializan seis aceites vegetales; soja, girasol, maíz, maní, canola y lino. Pero, como se mencionó anteriormente no es parte del mercado del aceite de palma, aunque si tiene participación en mayor o menor medida en los otros tres aceites más importantes a nivel internacional; soja, girasol y colza. La colza 00 es también llamada canola, donde el doble cero implica que la variedad es apta para consumo humano, diferenciándolo del grano tradicional que se utiliza habitualmente en diferentes industrias como lubricante o en la producción de biodiesel, por ello se lo encuentra con el nombre aceite de canola.

Por el lado de la producción de aceite de soja, ha ido disminuyendo en las últimas tres campañas, aunque teniendo en cuenta que el ciclo comercial de la 2023/24 aún sigue en curso, podría revertir su comportamiento y mostrar una mejora debido a una recuperación en la producción de poroto de soja. En promedio, del total producido de aceite se exporta el 68%. Por lo que, según SAGyP, hasta octubre se llevan producidos 5,5 millones de toneladas, habiéndose exportado 4,3 millones de toneladas, diez puntos porcentuales por encima del promedio de las ultimas diez campañas. Este subproducto se ubica en cuarto lugar entre los productos más exportados de lo que va del 2024, representando 4.287 millones de dólares en concepto de exportaciones.

En cuanto a la producción de biodiesel del corriente año, hasta septiembre presentó una recuperación del 11% respecto al 2023, ubicándose en 922 mil toneladas, de las cuales el 35% fue destinado a la exportación. Así mismo, se ubica en valores lejanos al promedio de los últimos diez años, que se sitúa en 1,8 millones de toneladas.

Considerando la producción del otro aceite argentino, el girasol, viene incrementándose en las últimas cuatro campañas, a su vez, acompañado por un incremento en el porcentaje destinado a la exportación. En los últimos diez ciclos, la proporción que se exporta del total producido se ubica en un promedio del 50%. Mientras que, en el ciclo en curso, hasta octubre se llevan producidos 1,4 millones de toneladas, con aproximadamente 880 mil exportadas, 30% por encima del promedio de los últimos diez años. Para lo que va del 2024 el aceite de girasol explicó USD 770 millones de USD en concepto de ingresos de divisas al país.

Para el caso del aceite de canola argentino, desde el 2015 hasta el 2023 la producción de este subproducto se fue deteriorando, pero, a partir del 2024 se reactivó, habiendo industrializado en lo que va del año 6.600 toneladas. En conjunto, este año se retomó la exportación del producto, luego de cinco años sin generar divisas a través de este concepto.

 

 

 

El mercado de aceites vegetales tiene un gran futuro en la transición energética a través de su utilización como insumo para la producción de biocombustibles, más sostenibles con el medio ambiente. Sin embargo, el corto plazo presenta un gran desafío para los productores de aceites vegetales. Menores precios del petróleo y gobiernos más proteccionistas generan incertidumbre y presiones bajistas en los precios.


Fecha: 02/12/2024

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